¿Qué es el Cursillo?
Es una vivencia. Para saber lo que es, hay que vivirlo. Es un curso breve pero intenso de tres días, donde habrá un encuentro con uno mismo, un encuentro con los hermanos y un encuentro con cristo. Se realizan dos cursillos de varones y dos de mujeres por año y dos jornadas metodológicas.
Don Jaime lo definió como “La gallina de los huevos de oro de la Iglesia”.
¿Por qué habrá dicho esto? Porque la nueva Iglesia de Neuquén, creada en 1961 por el Papa Juan XXIII, recibió con los Cursillos una inyección de gran vitalidad a través de nuevos cristianos comprometidos y nuevos dirigentes y agentes pastorales que enriquecieron las Comunidades nacientes.
En gran medida las Comunidades cristianas de Neuquén capital, de Cutral Có y también de Zapala, se fortalecieron y crecieron con la llegada de oleadas de nuevos miembros provenientes de los Cursillos.
El gran ambiente que primero se enriqueció en Neuquén con los Cursillos fueron las Comunidades, y de ahí, cada cristiano metido y comprometido en su Comunidad, era fermento en los demás ambientes donde daba testimonio de cristiano.
Se estaba cumpliendo la finalidad y meta propuesta por los fundadores del Movimiento en Neuquén hace 55 años que el movimiento esta en Neuquén.
Hoy en la actualidad se trata de llegar al alejado, a ver las fragilidades y que todos sepan que “DIOS EN CRISTO LO AMA”.
Breve historia de los Cursillos de Cristiandad
España: Los Cursillos de Cristiandad fueron fundados en 1944 en Palma de Mallorca, España, por un laico de la Acción Católica, Eduardo Bonnín, para los jóvenes de la Acción Católica. La finalidad era el encuentro consigo mismo, con Cristo y con los hermanos; y la meta, fermentar los ambientes de lo fundamental cristiano.
Argentina: Llegaron a nuestro país en los años ’60 por Tucumán. Luego bajaron a Córdoba y de allí a Buenos Aires.
Neuquén: Don Jaime se enteró de los Cursillos en su ida al Concilio Vaticano II de paso por España. El Padre Juan San Sebastián lo hizo en Madrid en 1967. A su vuelta trajo documentación de todo el Movimiento. En 1968 el Obispo pidió al Secretariado de Buenos Aires que aceptaran gente de Neuquén en sus Cursillos. Fueron a hacerlo varias familias de Neuquén capital. Con ellos también Don Jaime. Para la clausura de su Cursillo fueron varios automóviles a la Capital para darle la sorpresa. En 1970 se decidió que era tiempo oportuno para hacerlos acá con un Equipo formado por dirigentes de Buenos Aires y de Neuquén y Curas de allá y de acá. Se hacían encuentros de rodaje en Bahía Blanca, a mitad de camino. En Mayo de 1970 se hizo el primero de hombres en el Colegio San Miguel de Padre Alejandro Steffenelli. El primero de mujeres se hizo en el colegio María Auxiliadora de General Roca.
Casa de encuentros: Finalmente en Setiembre de 1973 se hizo un Cursillo de Mujeres en la querida Casa de Encuentros de Plottier. Esta casa fue construida con tres pabellones de gamelas de la empresa constructora de Cerros Colorados. Luego se fue mejorando y robusteciendo, al punto que no queda nada de la primitiva casa prefabricada, comprada por laicos que habían hecho el Cursillo esos años.

